El jazz es un recurso que estimula el desarrollo emocional e intelectual de los niños. Es un estilo musical marcado por la improvisación, muy rítmico, muy emotivo. Al igual que otros estilos musicales, presenta numerosos beneficios para los niños y facilitan su expresión y su creatividad.
Invitemos a los niños a escuchar jazz; a involucrarlos más activamente incentivándolos a que acompañen la música con diversos instrumentos; y a que inventen canciones o bailes. Así será un recurso aún más creativo y beneficioso .
¿Qué aporta el jazz a los niños?
- MUESTRA LA BELLEZA DE LA IMPROVISACIÓN MUSICAL
La habilidad de enfocarse en el momento presente, en lo que está sucediendo ahora mismo sin agobiarse, se puede lograr dejando a rienda suelta la creatividad, la intuición y la imaginación. La improvisación favorece la expresión y la concentración. Los niños se pueden sentir libres de ejecutar algo por ellos mismos, de experimentarlo y sentir la confianza de que lo pueden lograr. Como todo está permitido, no existe el error; esta práctica no se centra en las equivocaciones sino en su transformación en nuevas ideas.
2. CONTAGIA ALEGRÍA Y VITALIDAD
Es un estilo musical lleno de vitalidad, escucharlo los llena de entusiasmo. Algunas piezas de jazz ayudan a la relajación, permitiendo desconectar, descansar y así lograr un rato de esparcimiento. Si ellos mismos se incorporan a interpretar las piezas, las vivencias serán aún mayores.
3. ESTIMULA LA MOVILIDAD
Y por qué no bailar al son de la música jazz. Por qué no improvisar movimientos y hacer una coreografía. Sentir los ritmos y expresarlos con movimientos libres les dará un buen rato de recreación y disfrute. Así les permite trabajar la coordinación y la psicomotricidad.
Fuente: Social Musik. Team Casa de Tití.