La mayoría de las personas les gusta tener una televisión en el cuarto y colocarla también en el cuarto de sus hijos para que agarren sueño o se entretengan antes de dormir. Aquí les compartimos las investigaciones del Dr.Joaquín Terán, expresidente de la Sociedad Española del Sueño y jefe de la Unidad de Sueño del Complejo Asistencial de Burgos al respecto. Reflexiona si para tu familia es beneficioso o no.
Pareciera que en este nuevo milenio es casi obligatorio tener una pantalla en la sala y en la cocina, preferiblemente una muy grande. Además un televisor más en cada cuarto, o al menos en el cuarto de los niños, para mantenerlos tranquilos y cuidados y que los padres nos ocupemos de otras cosas.
Algo que perdemos de vista es que al permitirles que cuenten con la televisión en el cuarto es darles autonomía sobre qué ver, cuándo verlo y durante cuánto tiempo. Esto provocará a la larga que sean ellos y no nosotros quienes tengan literalmente el control en sus manos.
Una de las consecuencias según nos alerta el Dr.Terán es «La innecesaria exposición a la luz, antes y durante el sueño nocturno, puede causar problemas de salud, entre los que se encuentran las alteraciones del sueño». La luz emitida por dispositivos electrónicos utilizados antes del horario habitual de sueño produce un retraso de fase de la actividad del núcleo supraquiasmático y, en consecuencia, se retrasa la secreción de melatonina, aumenta la alerta, retrasa el inicio del sueño y disminuye la vigilancia por la mañana».
¿Qué tan recomendable es la tele en el cuarto?
Hagamos uso de nuestro sentido común y valoremos juntos las consecuencias:
- Falta de supervisión paterna: Al tener ellos el control del televisor se les hace muy difícil a los padres supervisar que programación están viendo, cuánto tiempo y si ven en la madrugada. Lo que les podría causar desvelos, somnolencia y falta de atención en la escuela y ansiedades por ver contenidos no aptos para su edad.
- Sedentarismo: Cuando nuestros pequeños están horas en su cuarto frente a la televisión, dejan de pasar tiempo al aire libre y de jugar propiciando la obesidad por tantas horas de inactividad.
- Afecta la socialización: Por ver tele tanto tiempo, no comparten ni disfrutan de la compañía de familiares y amigos .
- Desintegración familiar: Limita las conversaciones, ya que al no haber tiempo compartido existe poco de lo que puedan hablar. Cada cual posee información diferente que a la larga aleja a unos de otros. Es bueno recordar que por lo general la tecnología aísla y regular su uso, nos une con familiares, amigos, colegas.
- Alteración del sueño: ver la televisión «ejerce un efecto fragmentador del sueño» a consecuencia de la emisión de luz azul. Por lo que el especialista el Dr. Joaquín Terán, recomienda «desterrar la TV de la habitación donde dormimos «, «es un ritual nada positivo para tu salud «. Es mejor evitar el uso del televisor en el cuarto de los niños y de las habitaciones de toda la familia en general.
Fuente: Quo.es, familias.com, Team La Casa de Tití